El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, ha anunciado una inversión de 1.580 millones de euros durante el año 2024 para “mantener el funcionamiento de la oferta de transporte público”, lo que supone el 80% de las necesidades totales del sistema. Así lo ha manifestado durante un desayuno informativo organizado por Executive Forum, con la colaboración de Confebús y Sacyr.

Según Rodrigo, “los principales vectores de nuestra política de transportes son la accesibilidad, la conectividad territorial, la intermodalidad y la fiabilidad del servicio”, los cuales se plasman en una oferta de transporte público con la que el Consorcio Regional de Transportes (CRTM) trata de “responder a las necesidades de los madrileños, diseñando soluciones específicas para llegar incluso a los municipios más pequeños”.

El consejero ha aprovechado la convocatoria para explicar que la remodelación del mapa concesional de autobuses, que ya está llevando a cabo el Gobierno regional, afectará a las 468 líneas que atienden las 8.500 paradas en las 179 localidades. El nuevo mapa “es un trabajo que va a dar respuesta a las necesidades cambiantes de los usuarios, con mayor calidad, mejor cobertura, aprovechando las oportunidades que ofrecen las herramientas digitales y las nuevas tecnologías de motores y nuevos combustibles”.

El futuro modelo de transportes responderá a “la accesibilidad y conectividad territorial, favoreciendo la intermodalidad y planteando soluciones específicas que lleguen incluso a las áreas poco pobladas”. En la actualidad, la flota del CRTM está compuesta por 4.200 vehículos, urbanos e interurbanos, de los que el 73% están impulsados por energías limpias: electricidad, gas natural, híbridos o hidrógeno.

Además, Rodrigo ha manifestado su confianza en que “muy pronto comience la construcción del Bus-VAO de la A-2”, gracias a presupuesto de 11 millones de euros aportados por las tres administraciones públicas. El proyecto permite el cambio de sentido de circulación de un carril utilizando señales luminosas y sistemas de señalización inteligente. “Funcionará desde Madrid hasta Alcalá de Henares y se calcula que reducirá la duración del trayecto entre 15 y 18 minutos”, ha indicado.